En el sexo juega un papel importante la estimulación de ciertas zonas preparadas para responder a la estimulación sexual. Son conocidas como “Zonas erógenas”. Las podemos organizar en dos tipos:
Las primarias (genitales).
Las generales (resto del cuerpo).
Es importante resaltar que las zonas erógenas “generales” son igual de importantes que las “primarias”, ya que suelen ser olvidadas a lo largo del acto sexual.
Todo nuestro cuerpo es una GRAN zona erógena, y es tan grande como nosotros queramos que sea. Reducir la estimulación solo a lo genital da como resultado una capacidad muy limitada de placer sexual.
Hay una eternidad mucho más allá de los genitales que merece ser descubierta y estimulada. Se ha escrito mucho sobre las zonas erógenas, pero ¿sabes cuáles son y cómo estimularlas de la manera correcta?
Las zonas erógenas suelen ser similares, pero en cuanto a gustos se refiere cada uno de nosotros tenemos preferencias y necesidades distintas que merecen ser atendidas por iguales.
Aquí puedes ver cada uno de las zonas erógenas existentes:
La pregunta del millón :
¿Cómo explorar y estimular sin morir en el intento?
Para estimular y explorar al 100% solo se necesitan dos ingredientes: Curiosidad y GANAS. LISTO. Ese es el gran secreto… Esto lo puedes complementar con lo siguiente:
MASTURBACIÓN
Forma ideal para explorar el cuerpo y saber qué sientes, ya sea experimentando por ti mismo o incorporando también juguetes o una persona. Ve poco a poco recorriendo las diferentes zonas y enfocate en aquellas que te provoquen mayor placer.
MASAJE EN PAREJA
Si lo que quieres es explorar las zonas erógenas despertando el deseo en conjunto, te recomendamos disfrutar de las caricias. Y no solo limitandonos a usar las manos: los labios, la respiración cerca del otro o el propio contacto piel con piel.
Y recuerda:
No puedes dar en el blanco si no sabes cuál es.
¡Explora y disfruta más!
