Hay besos y besos, luego está el BESO NEGRO

¿Sabes qué puede resultar extremadamente placentero y explosivo? Un buen beso negro. Una practica no apta para mentes cerradas y cuadradas… esto es para quienes disfrutamos al máximo de nuestro placer y queremos MORE.

 

Sigue leyendo para conocer de este delicioso recorrido.

 

Primero, ¿Qué es el famoso beso negro

El beso negro, anilingus o rimming consiste en estimular con la boca el ano de otra persona (porque el de uno está un poco complicado, ¿no?). Hay personas que consideran poco agradables este tipo de prácticas y otras que le entran con TODO. Ya sabemos: para gustos los colores…y el negro sigue siendo un color muy popular.

El ano es una zona también súper sensible, así que recibir caricias orales en él provoca las mejores sensaciones.
¡Dejemos los tabúes aparte, POR FAVOR! Lamer esa parte no tiene por qué ser denigrante y jugar con el ano de un hombre no lo hace menos hombre (SE TENÍA QUE DECIR Y SE DIJO). Así que, si lo que te prende son las nuevas experiencias o el beso negro es lo tuyo, DALE SIN MIEDO.

COSAS A TENER EN CUENTA ANTES DE COMENZAR A JUGAR

Higiene

En el sexo siempre es importante lavarse antes, pero si va a entrar en juego la parte trasera del cuerpo en contacto con una lengua, incluso más, hay que eliminar cualquier olor o residuo.

Alimentación

Te recomendamos evitar ciertos alimentos antes del beso negro: sodas o comidas pesadas que puedan provocar gases involuntarios.

Protección hasta el final de los tiempos

Si eres quien da, ten súper presente la protección. Nos toca recordarte los posibles riesgos, sí pueden transmitir Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) por eso es importante que tengas a mano barreras de látex o de manera muy fácil puedes convertir tu condón en una.

La comunicación es la clave

La comunicación tanto en el acto sexual como en las relaciones, no es que sea «importante», ES BÁSICA y no se puede saltar por nada en el mundo. Hablando de una practica con tantos tabúes a su alrededor, mucho más. No tengas miedo a expresar lo que te gusta y lo que no. También crea un espacio seguro para que tu acompañante se sienta igual de cómodo en hacerlo.

En la variación está el placer

Combina lengüetazos más largos, con otros más cortos, más lentos o más rápidos. Es habitual comenzar haciendo sexo oral a pene o vulva y poco a poco ir deslizándose hacia abajo y hacia atrás hasta llegar a la zona del ano.

OJO: Ir al revés, del ano a los genitales, no es buena idea, podrías llevar posibles bacterias de un lado a otro.

Experimenta más

Si queremos aprovechar para innovar, ya que estamos por la zona, para meter algún dedo u otras cosas (plug anal, vibrador, dildo…) en el ano, podemos utilizar algún lubricante anal que facilite la labor.

¿Es lo tuyo, o sientes curiosidad? No existe ningún inconveniente en experimentar y disfrutar de nuevas sensaciones. Recuerda que la penetración no lo es todo ¡A disfrutar!

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